16/9/09

UNAS “VACACIONES” DIFERENTES

No creo que sea casualidad…

Desde hace muchos años me ha gustado viajar, ya sea cerca o lejos de casa, porque ningún viaje me ha defraudado y siempre me ha dado la oportunidad de aprender.

Sin embargo, cuando he viajado a países más desfavorecidos (que no son los países más pobres), siempre me rondaba por la cabeza que alguna vez tenía que quedarme a echar un cable en lo que pudiera ser útil. Este año tenía la oportunidad de hacerlo, pero no sabía muy bien en qué podía ser yo útil…, no soy médico, ni enfermera…!

Hablando el tema con ONG Mediterránea, se nos ocurrió que podía ayudar a las profesoras de la escuela de Abugida a dar clases de inglés, explicando libros de didáctica en inglés para niños de 3 a 6 años, llevando material escolar para la escuela, CD con canciones para aprender inglés, CD de películas para niños… y la idea me pareció tan buena que me puse a ello!


Mikel y Kerman aportaron sus libros y CDs que nos sirvieron para las clases
a gente se sorprende cuando les dices que las vacaciones las vas a pasar en una escuela en Etiopía, pero inmediatamente después siempre te dicen: “¿en qué puedo ayudar yo también?” No sabía qué decir, pero se me ocurrió que aquellos que quisieran, podían aportar un máximo de 5 euros sin ningún compromiso; y dejé correr la voz. Uno se da cuenta en estos momentos de la inigualable calidad de amigos y familiares que tiene!! Todos se volcaron en este proyecto, y entre unos y otros, conseguimos mucho más de lo que me hubiera podido imaginar!!!

Además, mis encantadoras hermanas y cuñadas me ayudaron a echarle imaginación, preparar material para hacer teatros, juegos, canciones etc. y ponerle chispa a las clases. Mis sobrinos de 6 y 7 años, me dieron también sus libros de inglés, pensando en que serían los libros de texto que nos servirían de base.

¿Qué más podía pedir?

Cuando estas preparando la mochila siempre te queda la duda de si estas acertando con lo que llevas, y en este caso todavía más, porque todo lo que llevaba no era para mí. Sin embargo, cuando ya aterricé en Abudiga, con lo bien que me recibió Zerihun, Ato Tamarat- el responsable de la escuela- Getrich y su familia donde me alojé, todas las profesoras y el staff de la escuela de Abugida, sabía que iba a ser una buena experiencia; para ellos y sobre todo para mí!

Un día de clase aprendiendo las canciones.

Abugida es un barrio pequeñito de Akaki, a unos 40 km de Addis Abeba, con la ventaja de ser un lugar muy tranquilo. Está rodeada de plantaciones de tef y, salvo el centro de Akaki y la carretera principal que viene de Addis, no ves un coche, se desplazan en carreta de caballos o bicicleta. Todavía me acuerdo de las tardes en que salía a correr por allí, y se animaban a venir conmigo 10 ó 12 niños…¡ los etíopes son atletas naturales!


La familia donde estuve alojada me trató como si fuera una más, y eso me hizo sentirme tan arropada como en casa, además de tener la suerte de convivir con ellos y conocer aun más su cultura. No sé todavía cómo lo hacíamos, pero a veces, chapurreábamos horas entre amárico e inglés sobre cualquier tema…, desde política internacional, religión, o resultados de Etiopía en el Mundial de Atletismo!!

Los niños de 5 a 6 años con sus profesoras

En la escuela estuve trabajando 15 días en los que nos dio tiempo a poner en práctica un montón de juegos y poder hacer con los niños de 5 y 6 años la primera lección entera del libro de didáctica! Con Sahai, la directora de la escuela y Ato Tamarat decidimos comprar con lo que llevaba, colchones, sábanas y almohadas para las siestas de los niños, además de un aparato para escuchar CDs en las clases y la cocina y alguna cosilla más.

Las profesoras estaban realmente motivadas, deseando que les explicara más cosas para ponerlas enseguida en práctica: primero entre nosotras y después con los niños que no dejaban de sorprenderme! En muchas ocasiones, tenía que aguantarme la emoción y la risa al ver a los niños cantando y haciendo los gestos de las canciones, o preparando algún teatro…, todo ello con la complicidad de las profesoras que sabían que los niños me iban a conquistar!


Todos los niños del Colegio en verano con sus profesoras


Así fue, no sólo me ganaron con su cariño los niños, sino también todo el staff de la escuela. No es un tópico… Las profesoras quieren a los niños con locura, las cocineras son excelentes, las de limpieza y administración un encanto, los de mantenimiento y almacén gente verdaderamente dispuesta… Al final son muchas horas las que pasas compartiendo cosas diferentes y experiencias nuevas, ellos y yo; y eso hace más intensa las relaciones. Todo el staff es como una gran familia, y tuve la gran suerte de poder formar parte de ella!


Me gustaría poder volver algún día…, aunque pienso que en realidad tampoco me he marchado, porque, como se dice… esta experiencia siempre quedará ahí!

matxalen