Cuando repaso en mi mente la evolución de Mediterránea y como ha llegado a el nivel de efectividad que tiene con tan pocos recursos, me asombro cada vez.
Eramos 6 al principio y solo disponíamos de un poco de dinero que cada uno de nosotros habíamos puesto en la cuenta para arrancar. Actualmente estamos ayudando a mas de 2500 niños en 2 continentes. No ha sido fácil y en ocasiones, como muchos sabéis, ha sido hasta peligroso el mantener los programas. Nos hemos enfrentado a corrupción, comportamiento mafioso, amenazas claras contra la integridad física, amenazas veladas y actitudes intimidatorias. Durante la trayectoria de Mediterránea han aparecido y ayudado muchas personas maravillosas. Algunas de estas personas han dejado la organización por que su destino les ha llevado por otros caminos y otros han seguido construyendo y dando vida a los programas que se van desarrollando.
Podemos decir que pese a la crisis, mes tras mes cumplimos con todos nuestros compromisos. La crisis no nos ha parado, pero si que nos ha reducido nuestra capacidad operativa y de expansión y ha llevado a muchas noches de mal dormir. En ocasiones hemos tenido que ajustar algún programa o área de un programa para así garantizar la continuidad de los mismos cosa que no nos ha gustado tener que hacer pero no había opción.
Una cosa buena que ha salido de la crisis es el hecho que cada vez mas las ONGs trabajamos juntas ayudándonos y compartiendo artículos, conocimientos y voluntarios. El rol de los colegios, escuelas, guarderías e institutos cada día es mas y mas importante en organizaciones como la nuestra. Al colaborar con Mediterránea muchos de estos centros académicos aprovechan para enseñar solidaridad, organización, publicidad, trabajo en equipo y hasta como hacer vídeos publicitarios a sus alumnos. He conocido chicos que han crecido con Mediterránea . La ven como una entidad que siempre esta ahí, ayudando a los necesitados y a la cual sus padres ayudan y ellos en sus colegios también. Me enorgullece el pensar que hemos servido para "normalizar" la solidaridad como parte cotidiana de la vida para muchos chicos y chicas del primer mundo.
Como bien es sabido todos los que formamos parte del motor de Mediterránea somos voluntarios. Cada uno que esta activo aporta el tiempo que puede a la entidad. Mediterránea no paga salarios en el primer mundo y esto nos ha permitido dedicar todos nuestros fondos a los programas . pero al mismo tiempo ha tenido el inconveniente que la ayuda humana necesitada no siempre ha estado presente, lo cual ha puesto en ocasiones mucho peso sobre pocos hombros. Aun así todo ha seguido para adelante y en estos momentos en los cuales la sociedad esta muy sensible y motivada, estamos cosechando muchos y maravillosos voluntarios para los programas.
Os quisiera dar las gracias por habernos ayudado a dar vida a un sueño de compañerismo y por darnos la esperanza de que podamos seguir creciendo ayudando a mas y mas niños. El futuro es suyo y la pequeña ayuda que les podamos dar sobre todo en sus momentos de máxima vulnerabilidad y necesidad marcara la diferencia.
Un abrazo,
Michael Stoma
