A propósito de los últimos tiempos convulsos en Abugida, queríamos desde aquí dar las gracias de una manera publica a nuestros voluntarios/as de este verano: Maria, Alejandra y Eduardo.Maria y Alejandra estuvieron en julio y Eduardo en agosto.
Sin María y Alejandra no hubiese sido posible que la guardería de Abugida sea lo que es.
Es esta una frase muy corta para explicar el verdadero significado de su trabajo.
Ellas tuvieron una entrega y una dedicación total, y lucharon contra las ideas preconcebidas que aun sin mala intención al final hubiesen conducido al desastre.
Consiguieron crear una guardería feliz y funcional donde los niños además de comer están estimulados y se lo pasan bien.
Y las cuidadoras están felices cuidándolos.
Consiguieron que las madres- mujeres muy humildes como todas las de la escuela- tuviesen voz en esa guardería.Al principio no se abrevian ni a hablar con las cuidadoras, ahora tienen reuniones con ellas y se informan mutuamente de cualquier aspecto relacionado con el niño/a.
Y Maria atacó el tema de las cuentas luchando como una jabata con el administrador y el almacenero, tema espinoso y nada fácil.¡Y encima pintaron la fachada de la guardería con motivos infantiles!
¿Hay algo que estas chicas no sean capaces de hacer?
Eduardo llego en agosto con la guerra declarada. Vaya momento para llegar más dificil, vaya inmersión en la realidad etíope.
Ni 50 masters de cooperacion te enseñan lo que a el le toco vivir.
Eduardo también lucho por Abugida y se implico al máximo. Siguió con el tema farragoso e insoportable de las cuentas.
Logró importantes mejoras en los precios compras del mercado aprovechando el cambio del equipo comprador.
Vivió esos difíciles días del cambio de cuenta ( que aquí puede parecer cuestión baladí y que allí se convirtió en una lucha titánica) y las reuniones tempestusas entre el kebele y los miembros de la escuela del edir.
Sabemos que sufrio mucho porque es un hombre muy sensible, pero al final, todos hemos ganado.Gracias, Ale, Maria y Eduardo. Con personas como vosotros el mundo es ciertamente mejor.
Teneros como voluntarios ha sido ciertamente un lujazo.
Os transcribo una carta de Maria que a nosotros también nos ayuda mucho a seguir el camino que nos hemos trazado:
"Ahora que ya he leído todos vuestros mails, no puedo menos que agradeceros la oportunidad que nos brindastéis de ayudar en algo tan bonito como es Abugida y, sobre todo, tan real. He estado con otras ONGs y de corazón os digo que nunca he sentido lo que he sentido este verano estando allí. Ni lo que estoy sintiendo ahora al saber que todo va a seguir yendo viento en popa, que mis peques van a seguir comiendo arroz con carne, lentejas y huevos (flipaba con sus caritas al ver venir los platos), que los bombones van a seguir aprendiendo a hacer encajables y a desarrollar sus pequeñas mentes para convertirse en los próximos maestros de Abugida, que los grandes seguirán repitiendo a coro lo que dice la maestra para poder, al final, hacerse la foto con su traje de graduación y un ramo de flores mientras sus padres los miran con orgullo.
Gracias también por demostrarme, una y otra vez, que el mundo de la cooperación puede ser como siempre pensé que debía ser: con principios. Me encanta formar parte de esta familia!!
Y, como bien han dicho por ahí ya alguno, a buscar socios!!!!
Un beso enorme a todos! "
